La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció finalmente que la viruela del mono tendrá otro nombre para evitar comentarios racistas o estigmatizadores y desde hoy se llamará mpox en todas las lenguas.
Following consultations, WHO will begin using a new term for “#monkeypox” disease: '#mpox'.
Both names will be used simultaneously for one year while 'monkeypox' is phased out https://t.co/VT9DAdYrGY pic.twitter.com/Ae6zgkefPI— World Health Organization (WHO) (@WHO) November 28, 2022
La OMS señaló que los dos nombres serán utilizados durante un año, antes de que el término monkeypox sea reemplazado por completo.
«La cuestión del uso del nuevo nombre en diferentes lenguas fue abordado largamente. El término mpox se puede utilizar en otras lenguas», señaló la OMS.
Si resulta problemático en alguna lengua, la OMS lanzaría consultas con las autoridades competentes.
Cuando comenzó el brote de viruela del mono en la primavera de 2022 se observaron en línea «declaraciones racistas y estigmatizantes», lo que hizo que algunos países e individuos pidieran un cambio de nombre, recordó la OMS.
La viruela del mono fue bautizada así porque fue identificada originalmente en monos destinados a la investigación en Dinamarca en 1958, pero la enfermedad se desarrolla más comúnmente en roedores. La primera vez que se notificó un caso en humanos fue en 1970 en la República Democrática del Congo.
Su propagación a humanos se limitaba hasta a ciertos países de África occidental donde es endémica. Pero en mayo, empezaron a aparecer casos de viruela del mono en todo el mundo.
¿Cuáles son los síntomas de la viruela del mono?
La enfermedad provoca los siguientes síntomas: erupciones cutáneas, que pueden aparecer en los órganos genitales o en la boca, y ser acompañada por fiebre, y dolores de garganta.
En la mayoría de los casos, los pacientes son hombres que mantienen relaciones sexuales con hombres.
Este año se han notificado a la OMS unos 81.107 casos y 55 muertes en 110 países.
El organismo, con sede en Ginebra, tiene la autoridad para bautizar las nuevas enfermedades y, muy excepcionalmente, cambiar el nombre de las ya existentes.
FUENTE: EXCELSIOR