La Unión Nacional de Padres de Familia, (UNPF) advirtió que la SEP tiene una tarea pendiente que tiene que ver con el aspecto socioemocional en el que se encuentran muchos alumnos y docentes que han perdido a seres queridos a causa del Covid-19 y esa pérdida puede afectar su desempeño escolar o laboral según sea el caso.
El vicepresidente de la organización, Luis Arturo Solís, comentó que las autoridades de educación deberán ser muy flexibles cuando se autorice el regreso presencial a clases porque muchos alumnos se quedaron sin papá o mamá, así como también muchos maestros perdieron a su esposo o esposa o a algún hijo.
“Recordemos que la pandemia trajo consigo la perdida de seres queridos hay niños que desafortunadamente regresarán al próximo ciclo con la ausencia de sus padres, y hay profesores que regresarán a la escuela con la pérdida de su esposa o esposo o de algún hijo”.
Dijo que, ante este tipo de circunstancias, que se originan por un peligroso problema de salud mundial, en México se tiene que llevar a la práctica esas famosas declaraciones que siempre dan los gobernantes y autoridades educativas: “que, en la toma de decisiones, por encima de todo, siempre está el interés superior de la niñez”.
En este mismo orden de ideas, el vicepresidente de la UNPF volvió a insistir en que todavía no es adecuado abrir las escuelas del país debido al alza de contagios que registran muchas entidades.
Dijo que no le ve el caso que se estén abriendo escuelas cuando ya prácticamente concluyó el ciclo escolar, como ocurre en algunas partes del país.
“Y además de todo, yo espero que la autoridad haga un diagnóstico sobre el proceso de aprendizaje y de regularización para el próximo ciclo escolar”.
