Uno de los elementos más importantes de las ofrendas que se realizan en México para el Día de Muertos es el papel picado, figuras que hacen referencia al Día de Muertos con catrinas y calaveras y que suelen colgarse alrededor de los altares, por lo que acá queremos contarles su historia, cómo es que se volvió toda una tradición en México.
De acuerdo con México Desconocido, el papel picado del Día de Muertos nació en San Salvador Huixcolotla, en el estado de Puebla. Aunque su origen también viene de la cultura de China, y la técnica igual se trabajó desde el siglo XVI en Europa, donde simplemente la llamaron papel cortado.
A mediados del siglo XIX, los peones eran obligados a comprar productos en las tiendas de las haciendas; entre éstos estaba el papel de China, el cual comenzaron a utilizar los habitantes de Huixcolotla en sus artesanías: el papel picado.
Ahora, de hecho, se conoce en otros países, como en Europa y Estados Unidos, donde se han montado exposiciones especiales del papel picado.
El papel picado, que no solo está presente en el Día de Muertos, también en las celebraciones del 16 de septiembre, en Navidad y en fiestas particulares como bodas y 15 años, comienza, obviamente, con un diseño, con un dibujo original.
Este dibujo se coloca sobre unas 50 hojas de papel de China clavadas, el cual servirá de guía para que, con cinceles, martillo, planchuela de plomo, se vaya cortando el diseño, sin lastimar el material.
La razón por la que se usa en la celebración del Día de Muertos, es porque en la época prehispánica, en las ofrendas que hacían nuestros antepasados por este día, colocaban representaciones de sus dioses hechas en papel amate.
Ahora, como muchos saben, esas figuras han sido cambiadas por calaveras, catrinas y otras figuras relacionadas con esta fecha.
Fuente: Sopitas