¡Mucho ojo! Las almohadas que corrigen la forma de la cabeza de un bebé, no son tan seguras como se cree.
Así lo advirtió la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de los Estados Unidos en un comunicado de prensa publicado el pasado jueves 3 de noviembre.
De acuerdo con este organismo regulador para la comercialización de productos alimenticios y de salud lo más recomendable es que:
“padres y cuidadores no usen almohadas moldeadoras de cabeza para bebés con la intención de cambiar la forma o la simetría de la cabeza de un bebé”
O aquellas almohadas de “muesca o agujero en el centro” que afirman previenen o tratan alguna afección médica para los niños pequeños.
¿Por qué son peligrosas las almohadas sirven para corregir la forma de la cabeza de un bebé?
Según la FDA utilizar las almohadas moldeadoras de cabeza para un bebé, ya que “puede crear un entorno de sueño inseguro para los bebés y puede contribuir al riesgo de asfixia y muerte”.
Cabe destacar que la FDA no ha aprobado que ese tipo de almohadas se vendan en Estados Unidos porque no se tiene evidencia de que sirvan para algún propósito médico.
Especialmente para tratar el síndrome de cabeza plana o plagiocefalia, que se da cuando un bebé duerme demasiado bocarriba.
El comunicado de la FDA es claro; señala que el síndrome de cabeza plana desaparece solo y en caso de notar una anomalía en el desarrollo craneal del bebé es mejor acudir a un especialista.
De hecho, los cascos, cintas para la cabeza y gorras son opciones aprobadas por la FDA para tratar el síndrome de cabeza plana.
El uso de almohadas moldeadoras de cabeza, en realidad, podría “retrasar la evaluación y el manejo de afecciones inofensivas” en un bebé.
“Si tienes una almohada para moldear la cabeza de un bebé, tírala; no lo done ni se lo dé a nadie más”, exhorta la FDA a todos los padres y cuidadores.
La FDA también expone que para crear un entorno seguro para que un bebé duerma es muy recomendable seguir los consejos de los Institutos Nacionales de Salud (NIH) y la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP).
Dichos organismos explican que los bebés “deben dormir boca arriba en una manta portátil sobre una superficie firme y nivelada y no debe haber juguetes, mantas u otros artículos en el área”.
La Dra. Sarah Schaffer, pediatra del National Children’s Hospital, en Estados Unidos explica que es muy común encontrar a la venta en Internet estas almohadas.
Sin embargo, la especialista espera que esta advertencia de la FDA sirva para eliminarlas y también se ponga atención a los asientos de autos que tampoco son muy seguros para los bebés.
Información de CNN