El gobernador de Tamaulipas Américo Villarreal Anaya, escuchó la denuncia de los regidores del Ayuntamiento de Ocampo, quienes acusaron al alcalde Melchor Budarth Báez de desvíos de recursos municipales, además de persecución política en contra de la síndico Adriana Lucio Guerrero, a quien el munícipe suspendió de sus funciones.
Este lunes el grupo de regidores acudió a denunciar los hechos ante el mandatario estatal en el sitio donde se llevó a cabo la ceremonia de honores a la bandera.
Los funcionarios municipales, hicieron del conocimiento del Gobernador que en el municipio se están presentando irregularidades, “ninguno de nosotros los regidores, nos prestamos a la corrupción, el señor (alcalde) está muy enojado, porque quiere recuperar el dinero que gastó en su campaña”, señalaron.
Los denunciantes señalaron que lo verdaderamente importante es que los recursos que llegan al municipio, sean manejados de manera honesta en beneficio de los ciudadanos de Ocampo.
Los regidores, dijeron también que en el municipio se han cometido diversos actos ilícitos a los que no se han prestado y por los cuales hoy son perseguidos políticos, mientras que en el caso de la síndico, fue suspendida de sus funciones.
“Hay robos a los que ella (síndico) no se ha prestado, hay fraudes cometidos por el presidente y el tesorero; y como ella no se presta a dar firmas, no se presta para la corrupción” indicaron.
“No puede ser que una persona (alcalde) tenga atemorizado a un pueblo en general; no vamos a permitir corrupción” enfatizaron.
En base a estos hechos, indicaron que realizaron la denuncia desde el 1 de diciembre de 2022 ante la Fiscalía General de Justicia del Estado, sin embargo, manifiestan que continúan sin conocer algún avance.
Dieron a conocer, que se han realizado obras que no fueron aprobadas por el Cabildo, además que no se les ha convocado a reuniones y mucho menos actas, irrespetando de este modo el código municipal.
Por su parte, Adriana Lucio, síndico municipal fue suspendida a principios del mes de diciembre del 2022, en una determinación de la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción de Tamaulipas.
De a cuerdo con lo informado a través de un comunicado de la citada Fiscalía, fue acusada de solicitar “indebidamente un beneficio para si, esto a cambio de ejercer las funciones inherentes al cargo”, en hechos registrados presuntamente el 16 de junio del año pasado.
Adriana Lucio comentó que ella ha sido víctima de persecución política, asegurando que desde que denunció lo que ocurre en el municipio, una camioneta le ha puesto “cola”, “me persiguen y él (alcalde) lo sabe; la puse ante la agencia del Ministerio Público y no ha procedido, la de él, la puso dos o tres meses después y procedió a los 20 días”. Agregando que teme por su vida, ante los hechos acontecidos, además de sufrir violencia de género, señalando que su salud se ha visto afectada, sufriendo parálisis por la presión ejercida por el alcalde, el tesorero, el secretario y el contralor municipal.