Es una de esas historia que estaba a punto de tener un final feliz pero terminó muy mal.
Unos 70 perros galgos que fueron rescatados de las carreras ilegales están a punto de volver al lugar de donde los sacaron. La insólita situación ocurre en la provincia de Santa Fe, donde un fiscal decidió restituir los animales a sus dueños que los usaban para las apuestas clandestinas.
La medida la tomó el fiscal Omar de Pedro y generó el repudio de activistas que se manifestaron en contra de la devolución de los perros a los «galgueros» e hicieron campañas en las redes sociales. Los perros habían sido rescatados por la Policía Ecológica durante un operativo en Santo Tomé, donde se realizaba una carrera de galgos (prohibidas por la Ley 27.330), el 2 de octubre pasado. Pero el funcionario judicial resolvió restituir al menos 61 de los animales a sus dueños.
Desde que fueron rescatados, los galgos se encontraban en hogares de tránsito en la ciudad de Rosario hasta que se resolviera su situación. Pero, llamativamente, el fiscal decidió hacer un acuerdo con los dueños y devolverlos a sus explotadores, según denunciaron los activistas.
El argumento de De Pedro fue que los animales estaban mal alimentados en los hogares de tránsito. La decisión causó indignación en las protectoras de animales y en la sociedad en general y el viernes se manifestaron en contra de la medida.
Según denunciaron los activistas a Clarín, hubo muchas irregularidades en el proceso y falta de recursos para poder operar con eficiencia: no hubo presencia veterinaria para que constatara el estado de salud de los animales en el allanamiento, ni tampoco se les realizó un análisis antidoping.
Y para colmo, en la ciudad tampoco había lugar para albergar a todos los perros, por este motivo, cerca de 50 fueron trasladados a Rosario mientras que los restantes quedaron en una quinta que pertenece a un policía de Santa Fe.
En Rosario, los canes fueron recibidos por la organización Galgos Libres que los albergó en diferentes casas particulares. «Estaban re contra asustados, les daba miedo hasta salir a la vereda», aseguraron desde la agrupación.
Además, precisaron que los galgos tenían muchos parásitos que empezaron a largar con los días, parásitos en sangre (principalmente Mycoplasma y Erlichia), Leocupenia algunos y músculos hipertrofiados.
«Les dimos pastillas para las pulgas porque estaban minados de garrapatas, les hicimos hemograma, screenings de hemoparásitos, ecocardios y ecografías», explicaron.
Las activistas realizaron una campaña de donación para poder pagar los gastos de alimentación estudios médicos de los canes ya que el Estado no podía hacerse cargo de esto. Pero para ellos el final fue conmocionante e indignante: el fiscal les sacó a los perros acusándolas de que los tenían en mal estado y los devolvió a quienes los hacían correr carreras.
Después de las denuncias de los activistas, Clarín consultó al fiscal Omar De Pedro sobre los motivos de su decisión de restituir a los perros.
El funcionario explicó que tomó el caso días después del allanamiento, que estuvo a cargo de otra fiscal, Rosana Peresín. Consultado sobre por qué no se les realizó un análisis antidoping a los perros confirmó que había sido «porque no estaban los elementos necesarios».
Vale destacar que un doping positivo elevaría la pena de los imputados a más de 8 años de prisión.
A la vez, explicó que por la falta de un lugar del Estado para albergar a los perros, se trasladaron cerca de 43 a Rosario y otros 15 quedaron en la quinta de un policía santafesino. Hay distintas versiones sobre el número de perros secuestrados en total y nada escrito.
–¿Por qué decidió devolverle los perros a los dueños?
-Porque me llegó información de que los animales estarían en una situación de riesgo, de que muchos estarían desnutridos, con problemas de estómago. Me explicaron que los animales llevan una dieta especial.
-¿De quién le llegó esa información?
-De tres abogados de los dueños de los perros que vinieron a decirme que el alimento balanceado común les causa descompensación.
-Más allá de la palabra de los abogados de los dueños, ¿recibió pruebas veterinarias de que los animales estaban mal?
-No. No me preguntes de dónde salían los videos, no lo voy a decir. Me informaron que habían varios perros en el mismo lugar, que se mordían, que una estaba en celo. Vi los videos y era así. Me preocupaba que los animales no estuvieran bien. No podíamos encontrarlos. Y los galgueros me mandaron fotos de los perros, de dónde vivían, que estaban bien en sus casas. Y me convencí.
-¿Por qué no podía encontrar a los perros, las chicas que los tenían le negaban la información? O esa información debía dársela la Brigada ecológica?
-La Brigada Ecológica era la responsable de enviar todo y no lo hicieron.
Con este argumento, De Pedro decidió mandar a buscar a los perros, que sí pudo encontrar dónde estaban e imputó a 43 personas.
«Aceptaron el delito, asumieron la responsabilidad. Si ellos no venían a buscar los perros nunca hubiese sabido de quién eran, entonces fue la única manera de poder imputarlos», señaló De Pedro.
«Les puse una multa de 30 mil pesos. Me interesaba que queden condenados, así que puse una condena de un año y si llegan a correr otra carrera quedan tras las rejas. Está el acuerdo pero eso se homologa con un juez en una audiencia. Y aceptaron controles en cualquier momento por parte del Estado para hacer análisis de sangre», precisó el fiscal.
El funcionario dijo que a partir de ahora «la Policía Ecológica tiene que armar una comisión para controlar cómo están los perros. Mi razonamiento fue: si no hago este acuerdo, no condeno a nadie. Y si los condeno, puedo saber dónde están los perros y cómo están».
A la vez, dijo que «los galgueros no están como tenedores definitivos hasta que se formalice la condena. Están solo como depositarios».
Cuando se le preguntó cómo están los perros ahora con sus dueños, De Pedro dijo que no tiene información. «Se encargó la Policía ecológica de devolverlos. Me tienen que elevar un informe de cómo están».
Tampoco supo dar información sobre los galgos que quedaron en la quinta del policía de Santa Fe, del que no se conoce su nombre, que se estima serán 15 aproximadamente.
-¿Cómo sabemos que los dueños no harán correr nuevamente a sus perros? Hay mucho dinero en juego en estas carreras clandestinas…
-Quizás me equivoqué. Era la única manera de tener al perro controlado.
Por su parte, la abogada Angelica Miotti, representante de Galgos Libres y presidente de Asociación Civil Amparo Animal, desmintió al fiscal De Pedro y dijo que se presentarán como querellantes.
“Devolvió los perros a los maltratadores. Y no contentó con eso salió a perseguir, injuriar y calumniar a la sociedad civil, diciendo que somos maltratadoras. Es de gravedad institucional”, detalló la letrada.
“El fiscal no puede argumentar de manera jurídica y sustancial desde las leyes su autoritaria de devolver los perros a los delincuentes. Son delincuentes porque el delito está comprobado. Él mismo dijo que cerró los acuerdos con los galgueros que violaron la ley 27.330 porque lo admitieron».
“Queremos la destitución del fiscal. Es muy grave que el fiscal caiga en esa bajeza con su dedo acusar abusando de su poder e incumpliendo sus funciones. El mismo fiscal está cometiendo muchos delitos. Incluso hay chicas que tienen miedo”, subrayó la letrada.
De hecho ya se creó una petición en la página Change.org para solicitar el apartamiento del fiscal Omar de Pedro de las causas animales.
Con respecto al argumento que usó el fiscal para devolver los perros, que detallaba que los animales habían bajado de peso, Miotti explicó: “Los perros bajaron de peso porque dejaron de inyectarles anabólicos. El Dr. Juan Romero nos explicó que es algo que pasa cuando se les cambia la dieta a esta raza”.
Pero el detalle que más llama la atención es que De Pedro argumentó que nunca le enviaron un informe de los perros. Sobre esto, la abogada dijo que el fiscal «nunca» les «pidió un informe veterinario».
“Y no creo que la haya pedido a la Policía Ecológica y ellos no lo hayan incumplido. Solo llamó a la responsable de galgos libres para decirle que nos iban a venir a sacar a los perros, para eso sí llamó”, precisó.
Además, se refirió a que todas las donaciones que recibieron por la causa. Dijo que no llegó a usarse todo el dinero y que las cifras de la cuenta bancaria son públicas. “Si el fiscal decide no devolver los perros a los hogares de tránsito, le devolveremos el dinero a quien lo pida de vuelta”, aclaró la letrada.
“Considero que es necesario que los funcionarios de la Justicia tomen con seriedad a las personas que denuncian y se arriesgan, a los que dan tránsito, a los periodistas que dan su tiempo a estos temas”, expresó la abogada sobre este caso polémico que tomó dimensiones nacionales y generó el repudio de los activistas más reconocidos de Argentina como Fernando Pieroni y de organizaciones como Animalistas Rosario, Change.org y muchas más que se pronunciaron al respecto en todas las redes sociales generando miles de comentarios de apoyo de los ciudadanos.
Fuente: Clarín